El Eurobasket 2025 dejó una de las imágenes más conmovedoras del torneo: Giannis Antetokounmpo, estrella de los Milwaukee Bucks, no pudo contener las lágrimas tras conseguir con Grecia la medalla de bronce, poniendo fin a 16 años de sequía para su país en esta competencia.
Un triunfo histórico para Grecia
Grecia venció 92-89 a Finlandia en el partido por el tercer puesto, asegurando su primer podio europeo desde 2009. El encuentro estuvo cargado de tensión: los helenos dominaron en la primera mitad con un marcador de 48-34, gracias al liderazgo de Giannis y la dirección de Vassilis Spanoulis desde el banquillo.
Antetokounmpo firmó una actuación monumental con 30 puntos, 17 rebotes, 6 asistencias y 43 de valoración, siendo la pieza clave para resistir la remontada finlandesa en los últimos minutos. A pesar de los intentos de Lauri Markkanen (19 puntos y 10 rebotes) y Olivier Nkamhoua, Grecia logró mantener la ventaja y asegurar la victoria.
Las lágrimas del “Greek Freak”
Tras recibir la medalla, Giannis no contuvo la emoción:
“Lo logramos. Esta es probablemente la mayor conquista de mi vida como atleta. Ganar una medalla con mi país significa más que cualquier anillo o trofeo individual. Representar a 12 millones de griegos es lo más grande que puedo hacer.”
El bicampeón MVP de la NBA y campeón en 2021 con los Bucks dejó claro que esta medalla tiene un valor especial, incluso por encima de sus éxitos en la liga norteamericana.
Un sueño cumplido después de años de decepciones
El camino de Grecia en competiciones internacionales había estado marcado por frustraciones: 15º en el Mundial 2014, 8º en 2019, 5º en los Eurobasket 2015 y 2022, y 8º en los Juegos Olímpicos de 2024. Esta vez, Giannis pudo cumplir la promesa que había perseguido desde su debut en 2017: devolver a su selección al podio.
“Cuando haces felices a 12 millones de griegos e inspiras a la próxima generación como los ganadores de 2005 nos inspiraron a nosotros, es lo más grande”, declaró Antetokounmpo, quien además ha mostrado su compromiso con el país fuera de la cancha, como en 2024 cuando donó cinco millones de euros para proyectos educativos.
Un legado más allá del baloncesto
Las lágrimas de Giannis simbolizan mucho más que un bronce. Representan el orgullo nacional, la resiliencia tras años de fracasos y el valor de inspirar a futuras generaciones.
“Hay un niño viendo la televisión ahora que creerá que puede ganar una medalla algún día, como yo lo creí cuando era pequeño”, aseguró el jugador, consciente del impacto de este logro.
Con esta medalla, Grecia suma su sexta presea en Eurobasket: dos oros (1987, 2005), una plata (1989) y tres bronces (1949, 2009, 2025). Para Giannis, es su primer metal internacional y posiblemente el más significativo de su carrera.
El Eurobasket 2025 quedará en la memoria por la imagen de un gigante que, entre lágrimas, recordó al mundo que el deporte trasciende trofeos y estadísticas: se trata de dejar un legado y unir a una nación.
